página principalperfilseguir
Las horas transcurren como si nada, haciendo caso omiso a las súplicas de una adolescente que busca desesperadamente retornar a sus tiempos.
Ay, mi Loreto... ¿cómo no te das cuenta de quién tienes al frente?, es alguien sumamente miserable, ¿y sabes por qué?, por el simple hecho de tratarme como algo molesto, como un obstáculo, siendo que hubo un tiempo en el que me juró amor eterno tal como lo ha jurado contigo hasta ahora.

¿Te imaginas que será de ti en su boca cuando todo dé por terminado?, no quiero ni pensarlo. Ya perdí la cuenta de las veces que he intentado convencerte de que lo de ustedes no es del todo verdadero. Una, por tu constante infidelidad, lo cual demuestra que no lo amas como dices hacerlo, y segundo, por la facilidad que tiene ese niño de olvidar y enamorarse de nuevo.

Publicado por Revelaciones de un añil opaco el jueves, 11 de julio de 2013 a las 12:22 a.m.
Entradas recientes | Revelaciones de un Añil | Entradas antiguas