Es increíble lo mal que me llevo con el amor... aún sin que me haga nada malo, lo detesto.
la relación (si es que se puede llamar así), ya se transformó en algo demasiado rutinario; Juntarse en una estación de metro, tomarse de la mano, salir a buscar algún lugar piola, besarse, despedirse, irse... ¿me entienden?, las dos semanas que han pasado han sido exactamente iguales, ni más ni menos sorprendentes.
¿Es así siempre?, porque si lo es, creo que detesto con toda mi vida las relaciones.
¿Por qué sigo con él?, no lo sé, algo me dice que debo ceder tiempo, pero ya he esperado mucho; Hoy veré si seguir en bicicleta, en auto, o quizás subirme al tren junto a él.
Publicado por Revelaciones de un añil opaco el domingo, 19 de mayo de 2013 a las 10:56 a.m.